Artículo completo

Healy se viste de amarillo y Pogacar cede terreno: el Tour entra en calor

La décima etapa del Tour de Francia 2025 ha encendido la mecha de la montaña, y lo ha hecho con una jornada que, sin ser de alta montaña, ha sacudido por completo la general. Tadej Pogacar, que hasta ahora había llevado con solvencia el maillot amarillo, resistió con garra los ataques del Visma-Lease a Bike, pero al final del día tuvo que ver cómo Ben Healy le arrebataba el liderato. El irlandés aprovechó una fuga bien organizada para ponerse al frente de la general en una jornada explosiva, marcada por la combatividad y la estrategia.

Desde el banderazo de salida, la etapa apuntaba a movida. El recorrido, por el siempre traicionero Macizo Central, ofrecía un perfil quebrado, con siete puertos de segunda y uno de tercera, además de varios repechos sin puntuación que terminaron por sumar más de 4.400 metros de desnivel. Era terreno para valientes, para aquellos que no le temen al desgaste y saben jugar con la ventaja táctica. Y en eso, el Education First dio una lección.

Healy se metió en la fuga buena del día, acompañado por otros 28 corredores, incluidos tres españoles: Iván Romeo, Raúl García Pierna y Pablo Castrillo. Junto a cuatro compañeros de su equipo, el irlandés mantuvo el pulso a un pelotón que no encontró respuesta clara del UAE Team Emirates. Los de Pogacar no lograron controlar la situación, y eso lo pagaron caro.

El que sí brilló con luz propia fue Simon Yates. El británico, que venía a hacer de escudero de Vingegaard, firmó una etapa impecable. Atacó en el momento justo y se llevó la victoria con autoridad, demostrando que el Giro no fue casualidad. Yates cruzó la meta en solitario, pero el golpe lo dio Healy, que con su segundo puesto se embolsó el maillot amarillo y el reconocimiento al más combativo. No ganó la etapa, pero se llevó lo importante.

Mientras tanto, en el grupo de favoritos, Pogacar trataba de mantener el tipo. Respondió con fuerza a dos ataques consecutivos de Matteo Jorgenson, que hizo de lanzadera para un Visma que no se guarda nada. Cuando el esloveno reaccionó con un fuerte demarraje en la última subida, Vingegaard respondió sin pestañear. Y eso, en el fondo, fue otra mala noticia para Tadej: el danés sigue ahí, sólido, esperando su momento.

La etapa también tuvo sabor local. Era 14 de julio, Fiesta Nacional en Francia, y hasta ocho ciclistas galos se colaron en la escapada buscando emular a sus ídolos. No lograron la victoria, pero Lenny Martínez dejó su huella al coronar cinco puertos y colocarse como nuevo líder de la clasificación de la montaña. Nieto de Mariano Martínez y hijo del campeón olímpico Miguel Martínez, Lenny sigue escribiendo una historia familiar ligada al ciclismo.

Con Healy vestido de amarillo y Pogacar aún con las piernas para pelear, el Tour entra ahora en terreno de alta montaña. Lo de hoy fue solo un aperitivo. Los Pirineos están al caer y ahí se verá quién está realmente para llevarse la corona. El Visma ya ha mostrado sus cartas. Pogacar ha resistido, pero empieza a mirar con preocupación al fondo del pelotón, donde su equipo no parece tener respuesta. El Tour no se gana en julio, pero sí se puede empezar a perder.