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Calma total... de momento

Así se podría definir la situación actual de la Real Federación Española de Fútbol (RFEF), como la excelente película protagonizada por una estelar Nicole Kidman y un soberbio Sam Neill.

El rumbo de la RFEF en los últimos meses es de un desconcierto absoluto, sin timonel ni patrón y podría resumirse en…rumbo colisión. La falta de liderazgo es una realidad incuestionable y por mucho que se intente dar una imagen de normalidad, la federación está inmersa en una gran crisis a todos los niveles. Los resultados positivos de las diferentes selecciones, en especial la dirigida por Luis de la Fuente, salvan un poco la imagen tan denostada de la actual RFEF.

Todos sabemos que la calma en la RFEF es cuestión de pocos días. Se ha iniciado el proceso electoral, por fin. No se sabe si Pedro Rocha, expresidente de la RFEF, inhabilitado por el TAD e imputado por el Juzgado nº4 de Majadahonda ha presentado una cautelarísima ante el organismo competente. Hay mucho silencio. Si fracasa en este agónico intento de agarrarse a sus últimas opciones para presidir la RFEF, hay muchos presidentes haciendo cola y con ganas de ocupar el puesto. Más de uno en privado da por amortizado al extremeño y esperan con ganas que vuelva a su ciudad natal para seguir regentando las tiendas de moda que tiene en la bonita ciudad de Cáceres.

Suenan nombres del entorno cercano a Rocha, de sus más fieles apoyos durante estos meses al frente de la RFEF. Algunos quieren postularse en cuanto Pedro Rocha esté definitivamente descartado. Estas cosas son siempre así. Ya lo decía Giulio Andreotti: «Hay amigos íntimos, amigos, conocidos, adversarios, enemigos, enemigos mortales y.… compañeros de partido»

Rafael Louzán, presidente de la gallega, apoyo incondicional de Rocha durante este último año, es uno de esos nombres que suenan. El gallego ha sido el gran punto de unión entre Rocha y Javier Tebas. Louzán es del PP gallego -llegó a presidir la diputación de Pontevedra- y tiene una gran losa para poder presentarse. Louzán está inhabilitado siete años por un delito de prevaricación. Aunque interpuso recurso de casación ante el Tribunal Supremo, fuentes consultadas, no ven al gallego con posibilidades para librarse. Otro de los nombres que suenan en los mentideros federativos es el del presidente de la federación murciana, José Miguel Monje, mandamás en el fútbol sala español, ya que preside el comité. De la vieja guardia de Ángel María Villar, el murciano duda en si presentarse él o promocionar a alguien de su confianza para manejar la RFEF desde la sombra.

Estos son algunos de los nombres del entorno de Rocha que se quieren postular una vez caiga el cacereño. En los últimos días, está cogiendo fuerza otro posible candidato, Álvaro de Miguel, actual secretario general de la RFEF, también extremeño y promocionado por Pedro Rocha a ese puesto de gran importancia en una federación deportiva. El secretario entró en la RFEF en la época de Villar y ha sorprendido mucho su nombramiento como secretario por parte de Rocha, en especial, después de haber ocupado ese puesto un profesional como Andreu Camps con una excelente trayectoria y experiencia. 

Lo dicho, calma total en el entorno de Pedro Rocha, aunque muchos de sus apoyos incondicionales ya ven el futuro de la RFEF sin él y están esperando al capítulo final para dar por cerrado el libro.