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Los Timberwolves arrollan a unos Warriors sin Curry y empatan la serie
Sin su gran referente en cancha, los Warriors se vieron completamente superados por unos Timberwolves que no perdonaron ni un segundo. Julius Randle lideró con solidez y guió a Minnesota hacia una victoria contundente por 117-93, igualando la serie de segunda ronda de los playoffs de la NBA a un triunfo por bando.
Con Stephen Curry fuera por una distensión en el tendón de la corva —y sin fecha clara de regreso—, Golden State arrancó el partido dormido, y Minnesota lo aprovechó sin titubeos. Los Wolves abrieron con un parcial de 13-0 que dejó claro cómo sería la noche. Jimmy Butler, irónicamente, fue quien acabó con esa sequía con un triple, aunque eso poco cambiaría el guion.
Randle firmó una actuación brillante: 24 puntos y 11 asistencias que marcaron el ritmo del encuentro. A su lado, Anthony Edwards añadió 20 puntos y, pese a un susto por lesión, se mantuvo en pista y fue clave en la solidez ofensiva del equipo. Los locales mejoraron su producción desde el perímetro con 16 triples anotados de 37 intentos, un salto enorme si se compara con su pobre rendimiento en el primer partido de la serie.
La defensa de Minnesota, larga, intensa y bien organizada, tuvo una noche redonda. Sin la amenaza constante de Curry, se dedicaron a cerrar espacios y a asfixiar a los tiradores rivales. Buddy Hield y Brandin Podziemski fueron prácticamente invisibles en ataque, mientras que Jonathan Kuminga y Trayce Jackson-Davis intentaron mantener el tipo con 18 y 15 puntos, respectivamente. Sin embargo, no fue suficiente ante la avalancha ofensiva y defensiva de los Wolves.
Golden State tuvo una de sus peores salidas ofensivas en años. Solo 15 puntos en el primer cuarto, su peor registro en playoffs desde 2016, cuando firmaron 11 ante Cleveland en las Finales. Aquella vez, también perdieron. Esta vez, la historia no fue muy distinta.
Steve Kerr, sin opciones claras, optó por mover el banquillo y dio minutos a 14 jugadores, 12 de ellos antes de que se cumpliera el primer cuarto. Pero la fórmula no funcionó. Sin un líder claro y con una defensa que hacía aguas por todos lados, los Warriors nunca llegaron a encontrar el pulso del partido.
Para colmo, Draymond Green volvió a ser noticia por lo extradeportivo. Sumó su quinta técnica en lo que va de estos playoffs tras golpear con el codo a Naz Reid. Molesto por la falta que le habían pitado en su contra, Green no paró de protestar al árbitro Tony Brothers durante el tiempo muerto, rozando la expulsión. Curry, desde el banco, intentó calmar a su compañero para evitar males mayores, acercándose incluso a la mesa de anotadores.
El ambiente en el banquillo de Golden State fue de tensión contenida. Curry, con rostro serio, siguió el partido junto al cuerpo técnico mientras su equipo se deshacía en la pista. La incertidumbre sobre su recuperación añade aún más presión de cara al tercer encuentro.
Con esta victoria, Minnesota no solo empata la serie sino que manda un mensaje claro: sin Curry al 100%, los Warriors lo van a tener muy difícil para plantar cara. El tercer asalto promete ser decisivo, especialmente si la estrella de los de San Francisco sigue en el dique seco.
La eliminatoria sigue abierta, pero con un cambio de dinámica evidente. Los Timberwolves están encendidos, y si siguen así, podrían dar una campanada que pocos esperaban hace solo unas semanas.
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