La Asociación Mundial de Atletismo ha anunciado una serie de medidas contra la Asociación de Atletismo de Bahréin tras confirmarse varias infracciones de las normas antidopaje

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Bahréin se queda sin refuerzos: prohibida la nacionalización de atletas hasta 2027 por dopaje

Bahréin, un país que ha sido sinónimo de polémica en el atletismo internacional debido a su política de nacionalización de atletas, especialmente africanos, ha sido objeto de importantes sanciones por parte de World Athletics. Esta decisión, tomada tras una exhaustiva investigación, marca un antes y un después para el deporte en el país asiático y pone de manifiesto la determinación de las autoridades deportivas internacionales de luchar contra el dopaje y promover el desarrollo de talentos locales.

El 24 de agosto de 2024, World Athletics anunció una serie de medidas contra la Asociación de Atletismo de Bahréin (BAA) después de que se confirmaran varias infracciones a la normativa antidopaje. La más destacada de estas sanciones es la prohibición de nacionalizar atletas hasta el año 2027, un golpe directo a la estrategia de competición de Bahréin, que había cosechado éxitos significativos con atletas naturalizados de África.

Esta decisión fue el resultado de una investigación de 18 meses realizada por la Junta de la Unidad de Integridad del Atletismo (AIU). La investigación comenzó tras los incidentes de dopaje en los Juegos Olímpicos de Tokio 2020, donde dos atletas de Bahréin fueron descubiertos utilizando transfusiones de sangre homólogas, y la contratación de un entrenador sancionado por dopaje.

Además de la prohibición de nacionalización, Bahréin deberá invertir 7,3 millones de dólares en un plan estratégico para reformar su federación de atletismo. Entre las principales iniciativas está la creación de una academia de talentos destinada a priorizar y desarrollar el talento local. Esta academia no solo ayudará a identificar y formar a los atletas jóvenes del país, sino que también reducirá la dependencia de atletas extranjeros, un aspecto que ha sido criticado durante años.

Este plan también incluye la creación de una organización antidopaje independiente, que cumpla con las normas de la Agencia Mundial Antidopaje (AMA). Con estas medidas, Bahréin busca demostrar su compromiso con un deporte limpio y con la integridad en el atletismo.

A pesar de las sanciones, World Athletics ha destacado la cooperación de la BAA durante todo el proceso. Desde que se revelaron las infracciones, la asociación ha mostrado una "contrición genuina" y ha trabajado estrechamente con la AIU para desarrollar el plan estratégico necesario para implementar cambios reales en su sistema deportivo.

David Howman, presidente de la AIU, subrayó la importancia de estas reformas: “La BAA ha demostrado un genuino arrepentimiento por sus malas acciones pasadas y su compromiso con el cambio. La creación de una nueva Organización Nacional Antidopaje en Bahréin es un resultado particularmente significativo para el deporte limpio”.

El historial de infracciones de dopaje en Bahréin no es nuevo. En los últimos años, varios atletas han sido sancionados, como Kemi Adekoya, suspendido en 2019 por cuatro años tras dar positivo en esteroides, y Marius Kimutai, ganador del Maratón de Barcelona en 2023, quien fue suspendido por tres años tras un positivo en EPO. Estos casos, junto con los más recientes, han afectado la reputación del país en el ámbito deportivo internacional.

Sin embargo, con estas nuevas directrices y el compromiso de Bahréin de cambiar su enfoque hacia el desarrollo del talento local y la implementación de medidas más estrictas contra el dopaje, hay esperanza de que el país pueda recuperar su reputación y construir un futuro más brillante y limpio en el atletismo.

El camino no será fácil, y el éxito de estas iniciativas dependerá de la voluntad de Bahréin de adherirse a las nuevas normas y demostrar un verdadero compromiso con el deporte limpio. Los ojos del mundo del atletismo estarán atentos para ver si Bahréin puede transformar su sistema y convertirse en un ejemplo de integridad y desarrollo del talento en el deporte.

Estas sanciones y las medidas impuestas no solo buscan castigar las infracciones pasadas, sino también asegurar que el deporte se mantenga limpio y justo en el futuro. Es un recordatorio de que la integridad en el deporte no es negociable y de que las federaciones nacionales deben actuar con responsabilidad para proteger los valores fundamentales del atletismo.

El reto está ahora en manos de Bahréin: reconstruir desde cero y demostrar que el cambio es posible, incluso en un terreno tan complicado como el del atletismo de alto nivel.