---

Los despachos de abogados prestan servicios continuamente a sus clientes, y en muchas ocasiones lo hacen con el tiempo justo, impactando directamente en la calidad de los servicios que prestan

Por eso, deberían tener en cuenta unos sencillos consejos para mejorar el desarrollo de su propia organización con el fin de aumentar la calidad en sus servicios.

1. Las mejorías se alcanzan con esfuerzo

Para mejorar en los servicios hay que diseñar estrategias, dedicarle tiempo, valerse de recursos. Este proceso no es sencillo y requiere tiempo y persistencia. Puede conllevar más esfuerzo económico o más esfuerzo humano, o los dos a la vez. 

No puedes pretender cambiar la mentalidad de trabajo en tu firma en un solo día.

2. Sé claro con la clase de negocio 

Tienes que fijar a la perfección qué tipo de servicios quieres prestar, qué clientes crees que se van a interesar por tus servicios, qué zonas geográficas te interesa abarcar, en qué sectores te quieres especializar. 

De nada sirve disponer de capital humano (trabajadores) y dedicarle muchas horas trabajando si no se tiene claro los targets y objetivos. ¡Únicamente perderás el tiempo!

3. ¿Cómo llegar a los clientes?

Por lo general, los clientes no tienen tiempo para buscar por Internet al mejor despacho de abogados que les convenga por calidad y por precio. Tienen que ser los despachos de abogados quienes atraigan al cliente. 

Por lo tanto, piensa las vías más directas y más eficientes para ponerte en contacto con tus potenciales clientes. Utiliza las redes sociales, crea contenido mainstream (podcasts, vídeos, webinars). Alza la voz de tu despacho.

Invierte en la marca de tu despacho para que sea atrayente, clara y profesional.

4. Evalúa tus acciones

De nada sirve dedicar innumerables horas a realizar tareas si, después, no se puede observar el impacto de cada una de ellas. Si no se evalúan los esfuerzos jamás se sabrá si lo que se ha realizado es beneficioso para la firma, o si hay que cambiar de estrategia.

Es recomendable hacer un seguimiento a tus competidores para observar qué estrategias llevan a cabo y si, finalmente, les funciona o no.

Todas las estrategias tienen que ir encaminadas a poder llevarlas a cabo y a poder medir su impacto. Trata de planificar acciones que sepas que son alcanzables. 

No pienses en imposibles. Céntrate en lo que sabes que tu firma puede alcanzar.

5. Encuentra una fórmula exitosa. Y repítela.

Es normal que cuando se empiece con un proyecto de cero, la mayoría de las acciones no obtengan resultados beneficiosos. Emprender y negociar es buscar constantemente fórmulas que te garanticen el éxito de tus acciones, y al agrado de tus clientes.

En el momento que tengas una fórmula que se adapte a tu firma y a tus clientes, repítela. Emplea esa fórmula en innovar y en aumentar tus beneficios.

6. Experiencia del cliente

Tu firma no tiene que ser un despacho de abogados corriente. No sirve con prestar un servicio a un cliente y olvidarse de él para siempre. Tampoco sirve despreocuparse de la atención a tus clientes.

Céntrate en dar a tus clientes un trato agradable y exclusivo. Sé transparente con ellos a la hora de explicarles las soluciones a sus problemas. Explora con ellos las mejores vías para ayudarles y hacerles expandir en su sector. 

Un despacho de abogados no es un solucionador de problemas, es un consejero y una firma en la que confiar. Gánate a tu cliente.

7. Establece contacto con tus clientes

Los clientes merecen un buen trato y si es personalizado, mejor. Si puedes ver físicamente a tus clientes, hazlo. Si únicamente puedes comunicarte con tu cliente a distancia, llámale. El correo electrónico sería la última opción.

El cliente tiene que sentirse seguro con tu firma, y más si se trata de prestar servicios legales. La confianza generada entre tu firma y tus clientes es esencial. La conexión personal es muy importante a la hora de crear lazos con tus potenciales clientes.

8. Prueba y repite

Todas las acciones que realices conllevarán unos beneficios o unas pérdidas. De todas ellas podrás aprender. También aprenderás de tus clientes.

¡Se puede aprender de todo! ¡Aprovéchalo!