Un ambicioso proyecto pro bono, la Colaboración Pro Bono de Grecia (GPBC), que proporciona asistencia crucial a los solicitantes de asilo en los campos de refugiados de unas islas ubicadas en Grecia, ha sido anunciado como ganador del premio a la Innovación en Responsabilidad Social en los Premios Europeos de Abogados Innovadores del Financial Times.

El proyecto es un esfuerzo conjunto entre seis firmas - Allen & Overy; Ashurst; Charles Russell Speechlys; Dentons; Orrick, Herrington & Sutcliffe y White & Case - y la ONG European Lawyers in Lesvos (ELIL). Refugee Legal Support (RLS) también fue una ONG asociada en el primer año del proyecto. En su núcleo, el GPBC tiene como objetivo proporcionar apoyo y asesoramiento jurídico urgente a las personas vulnerables, con voluntarios que se centran en los preparativos para las entrevistas de asilo en primera instancia y trabajan en las solicitudes de reunificación familiar. Ayuda a personas de todas las edades, géneros y nacionalidades. 

"La increíble necesidad en Grecia había sido clara para nosotros durante algún tiempo, pero desarrollar un proyecto que pudiera realmente utilizar de manera significativa la capacidad de los abogados de los bufetes internacionales, y ampliar el impacto a través de la colaboración dentro del sector, requería una planificación cuidadosa", dijo Amy Grunske, Directora de Pro Bono Internacional de Orrick.

Se desarrolló una infraestructura completa del proyecto, con la capacitación, supervisión y apoyo necesarios proporcionados a los voluntarios del bufete por los abogados expertos de ELIL. Aplicado de manera verdaderamente colaborativa, cada firma proporcionó personalmente a los abogados voluntarios para que hicieran prácticas de dos semanas en Grecia, antes de pasar a las adscripciones remotas a la luz de Covid-19.

Hasta la fecha, el proyecto ha proporcionado a ELIL 50 voluntarios que asesoran a unos 1.400 solicitantes de asilo. Los que recibieron asesoramiento de abogados a través de ELIL tuvieron aproximadamente un 30% más de posibilidades de obtener protección internacional, lo que demuestra que el proyecto no sólo proporciona una asistencia jurídica vital, sino que también ha permitido a numerosos refugiados obtener asilo y evitar a los países en los que se enfrentarían a la posibilidad de persecución y posibles daños. "Estamos orgullosos de la cantidad de personas vulnerables a las que hemos podido ayudar en los últimos 14 meses, y apreciamos que el proyecto haya sido reconocido por ambos premios; es un verdadero testimonio del esfuerzo, la mentalidad unida y el ingenio de todas las personas involucradas", dijo Helen Rogers, Gerente Principal de Pro Bono de Allen & Overy. 

A principios de septiembre, un devastador incendio destruyó todo el campamento de refugiados de Moria en Lesvos, dejando a sus 13.000 ocupantes sin hogar y sin acceso a alimentos, agua, suministros médicos y saneamiento. La mayoría de ellos han sido trasladados a un nuevo campamento, donde todavía no se ha concedido acceso a los abogados. En Samos, el campamento ha visto casos confirmados de Covid-19 y permanece cerrado sin acceso a abogados. Los asociados en el proyecto están preocupados por lo que pueda ocurrir en el futuro a estas personas vulnerables y siguen comprometidos a prestarles apoyo y asistencia.