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Los "smart contracts" se están convirtiendo en un compañero de trabajo indispensable para los abogados

1. Supuesto de hecho

Las firmas legales abogan por servirse de la tecnología para complementar el trabajo de sus abogados. El blockchain, a pesar de que su definición sea desconocida por muchos profesionales del sector legal, está ayudando sustancialmente a muchos abogados que ven reducido su tiempo de trabajo, conservando, o ampliando a veces, su eficacia. 

Los contratos inteligentes ("Smart contracts" en inglés), han penetrado en el sector legal para quedarse. Herramientas potenciadas por el blockchain como Supreme han sido creadas para quitar labores tediosas a los abogados, útiles para cualquier tipo de firma legal, independientemente de su tamaño.

2. Implementación de Supreme 

Hemos estado desarrollando la , todas las cuales se capacidad de los contratos inteligentes en una serie de iniciativas diferentes ejecutarán en nuestra propia blockchain, Supreme. Supreme es una cadena de bloques diseñada para el sector jurídico y gestionada por él, con actores clave que forman los nodos que mantienen la red en funcionamiento. En esencia, proporciona a las partes interesadas del sector un libro de registro, que mejora radicalmente la forma en que los clientes y los abogados confían entre sí en un entorno digital y, a su vez, mejora la accesibilidad de los servicios jurídicos para las personas de todo el mundo. Aunque la tecnología de contratos inteligentes es todavía joven, especialmente en el ámbito de los casos de uso comercial, hemos podido lanzar y ejecutar una red de pruebas de Supreme.

Además de la propia cadena de bloques, estamos desarrollando una serie de herramientas de contratos inteligentes que se ejecutan sobre Supreme. Legaler ID, nuestra propia aplicación de identidad autónoma, permitirá que los abogados registren sus cualificaciones en Supreme y que los clientes verifiquen dichas cualificaciones para que puedan tratar con los abogados con confianza, sin dejar de ser remotos.

En consonancia con nuestra misión de utilizar la tecnología para hacer que los servicios jurídicos sean más accesibles, los abogados que utilicen Legaler ID podrán ganar Justice Tokens por los servicios jurídicos gratuitos que presten a clientes desfavorecidos. Cuando los clientes confirmen que los servicios han sido prestados en su totalidad, se activará un contrato inteligente que depositará automáticamente los Justice Tokens en la cartera del abogado. Esto será un gran paso hacia el desarrollo de sistemas más sofisticados para recompensar el trabajo legal socialmente crucial sin requerir la carga y el coste de un sistema supervisado por humanos. Gracias a los contratos inteligentes, el sistema está totalmente automatizado, excepto por un puñado de confirmaciones humanas.

3. Retos 

 Creo que, a grandes rasgos, el mayor reto de la implantación de blockchain en la actualidad es la rapidez con la que cambia su contexto normativo. Cualquier actualización a una tecnología novedosa lleva tiempo, y más aún cuando esa tecnología implica el manejo de tus activos o información más críticos. En el tiempo que se tarda en investigar, crear políticas en torno a una solución blockchain y diseñarla, pueden cambiar muchas cosas. Los cambios más sonados son la situación legal de los tokens en jurisdicciones clave.

La demanda de la SEC contra Ripple sobre el supuesto estatus de seguridad de su token, XRP, continúa en los tribunales de EE.UU., y algunos comentaristas anticipan que habrá apelaciones al Tribunal de Apelaciones o incluso al Tribunal Supremo, lo que llevará años. Tampoco son solo casos sobre si los tokens son valores. China prohibió recientemente la mayor parte de la minería de criptomonedas en sus fronteras, lo que precipitó un éxodo de mineros del que fue el mayor país minero de bitcoins del mundo. También hay cuestiones legales pendientes sobre los datos que manejan las cadenas de bloques. Algunos consideran que la principal legislación de la UE en materia de privacidad, el GDPR, que protege la propiedad de los usuarios sobre sus datos personales, está en desacuerdo con la naturaleza inmutable de muchas cadenas de bloques.

Las cuestiones legales abundan, pero sería un error sugerir que el destino de la tecnología blockchain está totalmente en manos de los reguladores. Por supuesto, también hay retos internos. La experiencia del usuario de las criptomonedas ha avanzado mucho desde sus primeros días, cuando simplemente comprar un token era difícil. Sin embargo, el diseño y la usabilidad de muchas de estas aplicaciones sigue siendo bastante técnico, lo que significa que sólo lo utiliza un pequeño nicho de personas. Cuanto más fáciles de usar sean las herramientas de blockchain, más amplia será su adopción. De nosotros, como creadores y desarrolladores, depende estar a la altura del reto.

4. Conclusión

El gran cambio tecnológico en la forma de realizar transacciones, tratos y acuerdos es inevitable en casi todos los sectores. En nuestro sector específico del derecho, ese cambio es el derecho digital y los acuerdos digitales. Estos avances suponen enormes beneficios para todas las partes, como la reducción de los costes de interpretación de la normativa, la negociación de los contratos y, en última instancia, los costes de las transacciones. Sin embargo, actualmente son demasiado caros para realizarlos. La abogacía humana sigue siendo más barata que un sistema de derecho digital que, hoy en día, implicaría el establecimiento de autoridades supervisoras centralizadas y con personal.

El blockchain cambia eso. Con las herramientas adecuadas, cualquiera puede crear un acuerdo digital para algo tan simple como el alquiler de una propiedad para un fin de semana. Esto es importante porque la entrega digital de apoyo legal (ya sea información legal o asesoramiento legal en un escenario específico) significa una entrega barata de apoyo legal, y eso ofrece un enorme beneficio a la sociedad civil. Percibimos la ley como el conjunto de normas que se aplican a todo el mundo, pero actualmente 5.000 millones de personas en todo el mundo no tienen acceso a la ayuda jurídica. En pocas palabras, potenciar el asesoramiento jurídico digital con blockchain nos permitirá hacer realidad la ley tal y como debería ser.

Este es sólo el beneficio que ofrece blockchain en nuestro caso de uso específico, pero es una metáfora útil. Dondequiera que se implemente en nuestro universo de constantes transacciones entre humanos, salva la "brecha de confianza" que antes ocupaban las relaciones personales o las instituciones. Ahora, en nuestro mundo cada vez más distribuido, podemos chatear, vender o negociar con desconocidos del otro lado del mundo, sin intermediarios que invadan la privacidad y generen costes.

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