Para amortiguar el impacto que el brote del virus tiene en los medios de vida de las personas y en la economía, la CE ha adoptado una respuesta económica integral a la pandemia. Se ha aplicado la plena flexibilidad de las normas fiscales de la UE, se han revisado las normas relativas a las ayudas estatales y se ha establecido una Iniciativa de inversión en respuesta al virus de la coronación por valor de 37.000 millones de euros, todo ello con el fin de proporcionar liquidez al sector de la atención de la salud y a las pequeñas empresas. 

Además, la Comisión Europea ha propuesto amplias medidas para garantizar la movilización de cada euro del presupuesto de la UE para la protección de las vidas y los medios de vida de los ciudadanos de la UE. Por consiguiente, el 2 de abril de 2020 la Comisión ha puesto en marcha una iniciativa con el nombre de "Apoyo a la mitigación de los riesgos de desempleo en situaciones de emergencia" (abreviado SURE), que fue concebida con el objetivo de proteger los empleos y los trabajadores afectados por el brote del coronavirus. Además, se puso en marcha una "Iniciativa de Solidaridad para la Salud" con un valor de 3.000 millones de euros con el objetivo de atender las necesidades del sistema de salud de los Estados miembros de la UE. Además, se propuso la reorientación de todos los fondos estructurales disponibles para responder a COVID-19. Las pequeñas industrias como la agricultura y la pesca y las más privadas de ayuda también recibirán más apoyo. 

La iniciativa SURE como instrumento para mitigar los riesgos de desempleo

Como ya se ha mencionado, la iniciativa SURE se diseñó para proteger los empleos y los trabajadores con el fin de apoyar los medios de vida y la economía de los ciudadanos de la UE. La iniciativa SURE proporcionará asistencia financiera de hasta 100.000 millones de euros en total a los Estados Miembros en forma de préstamos concedidos en condiciones favorables. Estos préstamos tienen por objeto ayudar a cubrir los costos de los planes nacionales de trabajo a jornada reducida aplicados por los Estados miembros de la UE, que son programas públicos que permiten a las empresas reducir las horas de trabajo de sus empleados y, al mismo tiempo, prestar apoyo a los ingresos. Con ello, los planes de trabajo a jornada reducida contribuyen a sostener los ingresos de las familias y, al mismo tiempo, a preservar la capacidad productiva y el capital humano de las empresas y la economía en general. 

Los beneficios de la iniciativa SURE son : 

• Se centra en la protección de los empleos de las personas 
• Apoyo financiero temporal 
• Despliegue rápido 
• Complementa los esfuerzos nacionales 
• Solidaridad entre los Estados Miembros 

Cómo funcionará SURE 

El impacto económico de COVID-19 varía según las diferentes industrias y empresas. Depende de una serie de factores, como la exposición a China como fuente de insumos intermedios, la posibilidad de cambiar a proveedores alternativos, o la existencia de inventarios o la dependencia de los avances en la producción "justo a tiempo", como ocurre en algunas empresas.

A fin de vigilar y evaluar los efectos de COVID-19 en las industrias y el comercio europeos, la CE está en estrecho contacto con las autoridades nacionales, los representantes de la industria y otras partes interesadas. Con todos los medios posibles, la CE actúa para apoyar a los diferentes sectores industriales, sobre todo a los que son vitales para la producción y el suministro de alimentos. 

SURE fue diseñado con el objetivo de proteger los empleos y los trabajadores afectados por el brote del coronavirus

La financiación está disponible para todos los tipos de empresas -pequeñas y medianas, así como empresas más grandes- de los Estados miembros de la UE. Se dispone de una amplia gama de financiación, como préstamos empresariales, microfinanciación, garantías y capital de riesgo. La Unión Europea presta apoyo financiero a más de 200.000 empresas cada año; la CE puede ayudar a localizar instituciones financieras que puedan prestar apoyo financiero.